Thursday, December 10, 2009

Historia de Cuevas de San Clemente





















Poco ha quedado escrito en referencia a esta humilde villa.


Hay evidencias arqueológicas de asentamiento y desarrollo humano en la comarca desde el neolítico pero apenas queda alguna bibliografía que no fuera pasto de las llamas en los momentos críticos de la historia, sobre todo en la edad media y en la historia reciente.

Se han encontrado multitud de restos fósiles, de los cuales estas tierras son fecundas, que nos hablan de un pasado remoto lacustre y anteriormente marino, periodos glaciales y fuertemente pluviales en consonancia con los demás datos de la región.

Sabemos más de la actividad biológica de la región hace un millón de años que de la de hace mil. Hay constancia a través de los restos de cerámica encontrados de que tanto la cañada como las estribaciones de la sierra de Mencilla y los márgenes tanto del río Arlanza como del Valparaiso y Carabias, fueron desde tiempos inmemoriales lugares de asentamientos fuertemente cosmopolitas debido a una actividad comercial frenética y al tránsito de caravanas entre los continentes africano y europeo, interrumpidas abrúptamente por la presencia romana entre los siglos I al IV y posteriormente, después de nuevos siglos de intercambio cultural, por el inicio del absolutismo europeo (siglo XIII) en cabeza de Felipe IV de Francia y Navarra, rey denominado "el Hermoso", que declaró la guerra a la orden de Temple. No se debe confundir este Felipe el "Hermoso" (1268-1314) con el Felipe el "Hermoso" (1478-1506) de Castilla, primero de la casa Absburgo, yerno de los Reyes Católicos. Se les suele confundir porque ambos se casaron por interés con respecivas Juanas y ambos recibieron el apelativo de "hermosos" por ser la única cualidad distinguible de sus personas.

Durante este nuevo periodo de oscurantismo y racias que culmanaría con los Reyes Católicos, comarcas como la de Lara o la del Arlanza sufrieron especialmente la ira de la inquisición y los azotes de la brutales persecuciones que por motivo de religión, de raza o de pensamiento, o por albergar supuestamente a fugitivos europeos, o, simple y llanamente, para lucrarse mediante el expolio y la a propiación arbitraria de personas, tierras y cualquier tipo de bienes.

Se sabe por algunas crónicas, escolios en códices medievales y referencias en textos arábigos, que ésta comarca esconde infinitamente mucho más de lo que se reconoce, pues no en vano se han seguido produciendo genocidios hasta casi nuestros días, por ejemplo, bajo las órdenes Fernando VII que terminó de manera bastante eficaz el dictador Francisco Franco.

Tradición de Cuevas de San Clemente





















La voz "cuevas" deriva del latín "ova" (hueco) y fue documentada por primera vez en el año 963.

Las cuevas eran antiguamente lugar de refugio para los perseguidos y muchas veces éstas eran convertidas en bodegas de vino y viviendas. 


Cuenta la tradición que éste fue el origen de la localidad de Cuevas de San Clemente, un origen que si bien es difícil de constatar actualmente a través de documentos históricos y restos arqueológicos, todos los indicios apuntan en esta dirección.



Esta localidad fue modesta en población pero pródiga en hidalguías, no en vano el apellido "Caballero", hoy ya casi perdido, es oriundo de esta región, es en esta comarca donde se encontraban los últimos descendientes de un linaje de guerreros que defendieron los derechos del ser humano con la vida.

Se cuenta que en la localidad hermana de "Mazariegos", hoy abandonada y en plena ruina, descansaban los canteros del gótico castellano, que recibían la piedra tosca de Hontoria de la Cantera para pulirla finamente antes de ponerla en camino de Hortigüela con destino al monasterio de San Pedro de Arlanza, y que en Cuevas de San clemente se avituallaban de las mejores reses bobinas y pellejos de vino sudado por la tierra karstica de sol y luna, para el sustento de los labradores de la piedra.


En estas tierras se celebraba el solsticio de la primavera para la fertilidad del ganado y la generosidad de la tierra. Al final del verano se celebraba la cosecha y la vendimia atrayendo a comerciantes de las tierras más remotas.

Las fiestas del 29 de septiembre de San Miguel Arcángel son una mínima expresión descafeinada de los festejos bacanales que aún nos cuentan algunos murales de  piedra como los de la ermita supuestamente visigótica del siglo XII, cuyo nombre aún nos hace un guiño subliminal, "Nuestra Señora de las Viñas". Y es que Roma y la Inquisición de Felipe el Hermoso consiguieron callar a muchos de los hombres y las mujeres buenos, de esta comarca, más no a la piedra, pues no la sabían leer.


Desgraciadamente tampoco hoy no han aprendido a leer el lenguaje lítico prerománico en el que se asienta la iglesia de Cuevas de San Clemente. No se os ocurra pensar que en su pila bautismal hacían libaciones a la diosa los celtíberos de siglo VII antes del hecho cristiano, pues dejaríais a varios concilios como mentirosos, y eso enfada mucho.


Que no susurre el viento...







Leyendas de Cuevas de San Clemente






















He querido empezar la colección de mitos y leyendas de la Ruta del Arlanza en este pueblo, no sólo por ser la cuna de mis raíces, cuyo árbol genealógico se pierde en el tiempo, sino también por que su nombre que parece estar dedicado a un santo: San Clamente.


Sería lógico pensar que este santo se refiere al Papa San Clemente de la Iglesia Católica del siglo I, o quizás a San Clemente de Alejandría, teólogo que vivió entre el siglo II y el siglo III, pero las fechas en que esta localidad comienza a aparecer con la actual denominación inclinan a pensar que más bien se debe a un papa del siglo XIV cuya santidad se me hace un poco difusa.

El nombre anterior de la localidad no puedo revelarlo por varios motivos, el principal es que no tengo la certeza debida como para publicarlo. Lo que sé es que en estas fechas cambió la denominación, probablemente por motivos de camuflaje, a la vez que sus habitantes comenzaron a ser denominados familiarmente "raposos" (raposo significa zorro, astuto, sigiloso) por los vecinos de las comarcas colindantes.

Para contar algo más de este "San Clemente" haré referencia a la leyenda de los últimos templarios que caminaron sobre la tierra, y que fueron condenados a la hoguera en Francia, precisamente por este señor que hizo tanto por la iglesia católica, y que canonizaron irónicamente los astutos antepasados de esta villa de Cuevas.

Para contar esta leyenda he escogido la narración de un amigo que se llama Javier Gómez, por su elocuencia y arte gramático, y al cual quiero dedicar desde aquí mi agradecimiento por esta aportación que encontré casualmente en http://sobreleyendas.com. Mis mejores deseos para Javier y para la página.

Los caballeros templarios y el Pergamino de Chinon

El 13 de octubre de 1307 comenzaron las detenciones, por orden real, de todos los caballeros templarios en Francia. Comenzaron los interrogatorios, los torturaron, y finalmente, acabaron reconociendo que aquellas acusaciones por las que habían sido detenidos, herejía y sodomía entre otras, eran ciertas.

Clemente V, Papa de aquella época, ordenó también la detención de los templarios que estaban en todo Occidente y en Chipre, y casi 600 caballeros más fueron llevados a París para ser juzgados. Corría ya el año 1309, y en esos dos años, algunos de aquellos primeros templarios detenidos, se retractaron de las declaraciones iniciales convirtiéndose así en relapsos. 54 de ellos fueron ejecutados en la hoguera en mayo de 1310.

En el Concilio de Vienne, en el año 1312, Clemente V dictó la bula Vox in excelso por la que suprimió la Orden del Temple quedando sólo pendiente de sentencia los casos de sus cuatro más importantes dirigentes: Jacques de Molay, Geoffrey de Charney, Hughes de Pairaud y Geoffrey de Gonneville.

Tras declararse inocentes, los dos primeros fueron llevados frente a la catedral de Notre Dame de París, y ante todo el pueblo, fueron quemados. Jacques de Molay, Maestre del Temple murió en la hoguera el 18 de marzo de 1314 no sin antes lanzar una maldición contra los dos culpables de su detención, el Papa Clemente V y el Rey Felipe IV instándolos a presentarse ante el Altísimo en menos de un año. Ambos, el Papa y el Rey murieron en pocos meses.

Pero éste no es sino un breve resumen de los hechos que ocurrieron entre 1307 y 1314.  

¿Qué fue lo que llevó a la desaparición de la Orden Templaria? ¿Hubo una conspiración contra ellos?

A la vista de un documento, y aunque ya se sabía, que ha sacado el Vaticano a la luz en octubre de 2007, está claro que sí. Esos documentos que han permanecido durante 700 años ocultos en los Archivos Secretos del Vaticano muestran lo ocurrido en los juicios que se realizaron contra los templarios en el castillo de Chinon.: es el tomo titulado “Procesus contra Templarios” y ya se le conoce como “Pergamino de Chinon” en el que el Papa Clemente V concedió la absolución a los caballeros templarios reconociendo que no había motivos para su enjuiciamiento.

Remontándonos a aquellos años, varias fueron las causas que llevaron a que una orden tan rica y poderosa como la del Temple desapareciera.

Inicialmente la Orden nació con el fin de preservar la religión católica y sus posesiones en el Mundo. Lo mismo ocurría con mucha otras ordenes militares, como los caballeros Hospitalarios, cuyo fin último era recuperar para la Cristiandad territorios sagrados de manos de los árabes. Sin embargo, cuando en el transcurso de la batalla de Juan de Acre, en el año 1291, perdieron las últimas de las posesiones en Tierra Santa, su razón de ser desapareció y con todo su poder y riquezas se convirtieron en un peligro para el orden gubernamental del momento. Así se lo temió Felipe IV "el Hermoso", quien veía inmiscuirse en muchos temas a los Caballeros Templarios, quienes a su vez sólo tenían que rendir cuentas al Papa, permaneciendo intocables para el propio Rey.

Por otro lado, tampoco sus hazañas eran bien recibidas entre el pueblo, pues suponían un costo extra que habían de soportar ellos mismos, dado que las ordenes militares estaban exentas del pago de impuestos.
Felipe IV, el principal impulsor de la lucha contra los templarios, además, odiaba a su Gran Maestre, Jacques de Molay, quien había accedido al puesto a costa del gran amigo del Rey, Hugo de Peraud.


Pero fue el dinero el gran motivo que impulsó a Felipe IV el Hermoso a comenzar la campaña persecutoria contra los Templarios. Las continuas luchas del reino contra Inglaterra y Flandes estaban vaciando las arcas, y Felipe IV andaba muy necesitado de dinero. Varias veces había tenido que acudir a los inmensos tesoros templarios, solicitándoles un préstamo. Las deudas con ellos aumentaban, y por tanto, eliminarlos suponía automáticamente que todas las deudas del Estado con los Templarios desaparecieran, y además, cabía la posibilidad de quedarse con todas las posesiones de los caballeros de la Orden.

Clemente V, al que ahora exculpa la Iglesia de aquella persecución en el pergamino de Chinon, no fue sino una simple marioneta en manos del Rey, más por miedo a ser asesinado o arrinconado como lo había sido su antecesor Bonifacio VIII, que por falta de poder, ya que era prerrogativa del Papado la dirección de todas las ordenes militares.

Perseguidos, cruelmente torturados y finalmente quemados en la hoguera, aquellos Caballeros Templarios de los que tantas leyendas e historias se han escrito desaparecieron en aquel año de 1314… o quizás no…

Turismo de Cuevas de San Clemente





















Cuevas de San Clemente es un pequeño pueblo localizado en la N-234 a 27 kilómetros de Burgos, que cuenta actualmente con una población decreciente de unos 50 habitantes.

Tiene un área de unos 14 km2 y es la localidad natal del famoso pintor, Modesto Ciruelos, pionero, y para muchos, el máximo exponente de la abstracción expresionista.

Cuevas de San Clemente es uno de los municipios afectados por la ZEPA (Zona Especial de Protección de Aves), que abarca el 11% de su término.

Situado en la comarca de Arlanza, las temperaturas pueden ser de 36 grados en verano y hasta 15 bajo cero en invierno.

Actualmente sus paisajes están profúndamente deteriorados por la explotación de sucesivas canteras que han sido abandonadas sin la preceptiva repoblación forestal como marcan los términos legales.

Así mismo la sobre-explotación cerealista está terminando con sus ancestrales sierras de pinares, sabinas, encinares y estepas que fueron en otro tiempo un paraiso para cérvidos salvajes y jabalíes.

No obstabte, está conformado por un conjunto de parajes de singular belleza que atrae cada año mayor número de cazadores y de recolectores de setas, y sigue siendo a pesar de los esfuerzos de la última dictadura militar, uno de los últimos refugios de las más antiguas tradiciones.


Enclavada en zona de interés turístico por ser de alta montaña, es un paso obligado para conocer dos de los más importantes espacios naturales protegidos de Burgos, los Sabinares del Arlanza” y la Sierra de la Demanda, cuyo recorrido en bicicleta puede resultar una aventura inolvidable.

Lugares de Interés:

· Fuente de San Clemente: cuyas aguas son beneficiosas para la salud, en especial para le riñón. Está en la misma N-234 un kilómetro antes de llegar al pueblo por una pista de tierra a la derecha, viniendo de Burgos en dirección Soria. Es un lugar perfecto para utilizarlo como merendero aunque de merienda fria, pues la normativa ya no permite encender hogueras al aire libre.

· Iglesia parroquial de Cuevas de San Clemente presuntamente románica con remates en gótico. Cabe destacar su pila bautismal de orígenes inmemoriales.

· Casa Consistorial sede del ayuntamiento, de cuya labor cabe destacar en los últimos años su afán por la restauración de los caminos vecinales y la limpieza de las escombreras ilegales que proliferaban impunemente por sus alrededores.

· Peña Cultural los “Raposos” calificativo que reciben los naturales de este pueblo por su ancestral extraordinaria habilidad para atrapar caza menor, en especial conejos y liebres, con lazos y a mano. La fama de gente vivaz y astuta a la hora de esquivar los reveses de la historia, hizo el resto.


Fotos de Cuevas de San Clemente























Pantocrator de San Clemente



Heráldica de San Clemente